Dominik Mysterio dice que ganó la confianza de WWE después de unirse a The Judgment Day, lo que lo ayudó a ganar mucha más seguridad dentro del ring.
Dominik Mysterio comenzó trabajando como babyface, haciendo equipo con su padre, Rey Mysterio, desde 2020. Pero su carrera cambió por completo cuando traicionó a Rey en Clash at the Castle 2022, convirtiéndose en uno de los heels más importantes de WWE. Unirse a The Judgment Day también sacó a relucir una nueva faceta de él y su química con el grupo conectó de inmediato.
Hablando en el Towers of Power Pro Wrestling Podcast, Dominik Mysterio comentó que trabajar con los miembros originales de The Judgment Day lo empujó a mejorar. El apoyo que le dieron detrás de cámaras lo ayudó a sentirse relajado y esa química se trasladó perfectamente a televisión.
Creo que cuando empecé a sentirme cómodo con The Judgment Day junto a Damian, Finn y Rhea al principio. Y luego cuando llegó JD, creo que todos esos tipos me ayudaron a sentirme cómodo.
Nos llevábamos bien detrás del escenario, así que nos llevábamos bien en el ring, nos llevábamos bien fuera de cámaras, por eso en cámara nuestra química simplemente funcionó y dio en el clavo. Eso fue lo que realmente me ayudó y me hizo darme cuenta de que podía estar al nivel de los grandes una vez que empecé a sentirme cómodo.
Me estaban hablando muy bien todo el tiempo y eso se me metía en la cabeza, eso le sumaba a mi personaje y luego la gente con la que empezaron a ponerme a trabajar.
Explicó que, al ganar más confianza, WWE comenzó a confiarle momentos importantes.
CM Punk estaba regresando, yo fui la primera lucha de Punk al volver. Randy regresando de lesión, yo fui la primera lucha de Randy al volver. Cosas así que empecé a notar que realmente comenzaron a confiar en mí.
También comentó que trabajar en NXT, RAW, SmackDown y los house shows al mismo tiempo lo ayudó a mejorar aún más rápido.
Y también, cuando estaba trabajando en NXT, hacía RAW y SmackDown, y también todos los eventos en vivo. Creo que eso realmente me ayudó, me consolidó y me dio la confianza de ‘sí, estoy aquí y lo estoy haciendo’.