Liv Morgan podría ser el centro de la división femenina de WWE en este momento, pero ni siquiera ella está inmune a encuentros incómodos con fans. Y aparentemente, un momento viral llevó a demasiada atención por las razones equivocadas.
En marzo pasado, el retrato “Liva Lisa” acaparó titulares antes de la edición del 21 de marzo de Friday Night SmackDown. La obra de arte inspirada en la Mona Lisa con el rostro de Liv tuvo a los fans literalmente adorándola fuera del arena. El clip se volvió viral, y la propia Liv incluso bromeó sobre querer colgarlo en el Louvre. Pero ahora, ha revelado que el hombre detrás del retrato se acercó demasiado para su comodidad mientras estaba en el extranjero.
Apareciendo en el podcast Untriggered, Liv contó la historia completa.
“Bueno, nadie se atrevería a acercarse a mí cuando estoy con Dominik,” comenzó, dejando claro que la presencia de Dominik Mysterio suele mantener las cosas bajo control. “La única vez que no estaba con él, estábamos en Italia, y alguien hizo un retrato de la Mona Lisa, pero era yo en lugar de la Mona Lisa. Era la Liva Lisa. Era mucho mejor, como, mucho más atractiva.”
Luego vino la parte que los fans no sabían.
“El tipo que ayudó a hacerlo, puso su mano sobre mí,” dijo Liv. “Y yo estaba como, ‘No, no, no, no, no. Daddy Dom.'” Dejó claro que, aunque el tipo pensó que solo estaba siendo amigable, cruzó la línea. “Y él se puso todo nervioso y la quitó. Así que cuando él no está cerca, me defiendo sola.”
Morgan no dijo si la seguridad de WWE intervino o hasta dónde llegó la situación, pero el mensaje fue alto y claro: solo porque un fan crea algo viral no significa que tenga permitido ignorar el respeto básico.
Liv manejó la situación con gracia, pero el incidente es otro recordatorio de que la admiración no le da a los fans el derecho a ponerse físicos. Independientemente del escenario—arena o en el extranjero—los límites lo son todo.
El retrato “Liva Lisa” pudo haber sido hilarante, pero esta historia agrega una capa más oscura al momento viral. Y aunque Liv pudo haberse reído de ello, está claro que no tiene miedo de poner un alto cuando las cosas van demasiado lejos.