
Como se señaló anteriormente, antes del comienzo de la lucha de seis hombres en WWE Night of Champions, un fanático entró en el ring y se paró junto a Roman Reigns y Dean Ambrose antes de comenzar la lucha ante la familia Wyatt. La seguridad WWE se hizo cargo rápidamente del hombre y se lo llevaron.
WWE envió esta declaración sobre el incidente: “WWE tiene la seguridad de nuestros talentos muy en serio y cualquier fan que entre al área del cuadrilátero será procesado con todo el peso de la ley.”