El Royal Rumble del domingo tuvo un resultado que por lo que he visto dejó a muchos fanáticos satisfechos. No hay duda que si la WWE hubiese decidido que Roman Reigns ganara la batalla, se hubiese formado un motín en línea y considerando eso, Drew McIntyre era mejor opción.
Habiendo dicho eso, McIntyre no debió haber ganado el Rumble.
El lunes en Raw tuvimos el primer “reality check” de que Drew sencillamente no tiene magnetismo con la fanaticada. No tuvo mucha reacción a su salida (y no la estaba teniendo los meses antes), tuvo coros tenues hacia su persona, y su lucha de desventaja no tenia calor de los presentes. Una persona con este escenario no debe ser contendiente para un campeonato en WrestleMania.
Mucha gente habla sobre el “potencial” de McIntyre, pero estamos hablando de un luchador que lleva 13 años en el negocio y eso para mi no es suficiente razón para “merecerse” esta oportunidad ¿Puede que la lucha con Lesnar sea “buena”? Sí. ¿Tendrá la electricidad de una lucha estelar de Mania? NO.
Entonces, ¿quien debio haber ganado el Rumble?: Rusev.
Rusev ha probado que ha conectado con la fanaticada en distintas ocasiones, de rudo y técnico. Hemos visto que hasta en esta tétrica historia de Lana y Lashley, Rusev genuinamente ha podido rehabilitar su personaje y hacer que la fanaticada lo apoye dentro de esta difícil dinámica.
Con un poco de protección en el booking (en otras palabras, que no lo pongan a perder) Rusev podría estar aún más fuerte y popular con la fanaticada y listo para cualquier escenario estelar.
Pero, sobre todo, Rusev vs Lesnar por el campeonato para mi es una lucha de Wrestlemania más atractiva en papel y dentro del ring que Lesnar vs McIntyre. Y en este caso, Rusev SÍ la merece.
McIntyre va a necesitar mucha ayuda en esta ruta a WrestleMania, y espero que la WWE no haya cometido un grave error en una de sus estelares del evento más grande del año.
